Cuando visité la intervención de Bandebereho en Musanze el mes pasado, observé que es posible transformar para desafiar la dinámica de género a nivel del hogar.
Nuestra historia
El gobierno de Ruanda ha defendido activamente la igualdad de género a través de diversas políticas e iniciativas gubernamentales. Un ejemplo reciente fue la Observaciones de apertura El Presidente Paul Kagame dio unas palabras en la ceremonia de apertura de la conferencia Women Deliver. El Presidente Kagame dijo:
“Debemos desafiarnos a nosotros mismos para hacer las cosas de manera diferente y con sentido de urgencia.
Los compromisos que no se traducen en acciones no pueden cumplir nuestra promesa de construir un futuro más justo, equitativo y próspero para las generaciones que nos seguirán.
También invertimos en programas para involucrar a los hombres a nivel comunitario sobre la importancia de compartir las responsabilidades del cuidado infantil y prevenir la violencia doméstica”.
El programa Bandebereho es el ejemplo clave de los programas a los que se refería el Presidente. El programa, muy valorado por el Parlamento de Ruanda, muestra el compromiso de Ruanda con el desmantelamiento de las disparidades de género. En colaboración con el Ministerio de Promoción de Género y Familia y el Centro Biomédico de Ruanda, el programa tiene como objetivo desafiar las normas de género tradicionales, empoderando a las mujeres en la toma de decisiones, el liderazgo comunitario y la autosuficiencia económica. evento de difusión En relación con el programa, la Ministra de Género y Promoción de la Familia, Prof. Bayisenge Jeannette, afirmó:
“Cuando visité la intervención de Bandeberehero en Musanze el mes pasado, observé que es posible transformar para desafiar la dinámica de género a nivel del hogar”.
En el centro del compromiso del gobierno se encuentra la Política de Género, que reconoce la carga desproporcionada del trabajo de cuidados no remunerado que recae sobre las mujeres. Esta política aboga por la distribución equitativa de las responsabilidades domésticas y de cuidado entre los miembros de la familia, fomentando una sociedad más equilibrada.
Para reforzar su compromiso, el gobierno de Ruanda ha puesto en marcha programas de protección social, entre ellos Visión 2020 y el Programa Umurenge (VUP). Estos programas proporcionan transferencias directas de efectivo a hogares vulnerables, aliviando la pobreza y mitigando el impacto desproporcionado del trabajo de cuidados no remunerado sobre las mujeres, haciendo hincapié en que la seguridad económica no es excluyente en cuanto al género.
En el ámbito del desarrollo de la primera infancia, Rwanda ha introducido una política integral que reconoce el papel fundamental de los padres y los cuidadores en la prestación de cuidados de calidad a los niños pequeños. Al garantizar un acceso equitativo a los servicios de desarrollo de la primera infancia, el Gobierno pretende aliviar la carga de cuidado que recae sobre las mujeres y mejorar las perspectivas de los niños.
Ruanda también ha logrado avances importantes en materia de políticas de licencia por paternidad. La licencia por maternidad remunerada ayuda a las madres trabajadoras a cuidar de sus recién nacidos, y la reciente introducción de siete días de licencia por paternidad pone de relieve el compromiso del gobierno con el equilibrio de responsabilidades en el hogar. Existe una propuesta en curso para ampliar la licencia por paternidad a un mes.
En un firme compromiso con la igualdad de género, el gobierno de Ruanda ha integrado los principios de presupuesto con perspectiva de género en sus procesos nacionales de planificación y presupuestación mediante la Declaración anual sobre presupuesto con perspectiva de género. Este enfoque garantiza que las consideraciones, incluido el impacto del trabajo de cuidado no remunerado, se incorporen sistemáticamente en la asignación de recursos y la formulación de políticas, promoviendo así un enfoque de gobernanza que tenga en cuenta las cuestiones de género.
El camino de Ruanda hacia la igualdad de género se caracteriza por su resiliencia y determinación, trascendiendo fronteras e inspirando esperanza a nivel mundial. La dedicación del gobierno, como se demuestra a través del programa Bandebereho, la política de género, las iniciativas de protección social, las políticas de desarrollo de la primera infancia, las políticas de licencia parental y los esfuerzos para combatir la violencia de género, es un faro de esperanza. Con una dedicación tan inquebrantable a la igualdad de género, el futuro de Ruanda encierra la promesa de un mundo más brillante y equitativo para todos sus ciudadanos.