Hay hombres que han respondido a un desafío y se han ganado el respeto de su comunidad y su familia. Estos hombres no son presidentes, titanes de los negocios ni líderes religiosos; tampoco son luchadores ni soldados. Estos hombres son simplemente padres.
En un mundo en el que muchos niños sienten que sus padres son distantes, dominantes o cerrados, tú tienes la oportunidad de ser un padre que se preocupa profunda y compasivamente por su familia y su comunidad, y que tiene el coraje de demostrarlo.